Febrero de 2017 marca el 25º aniversario del I Comité Mundial de Estudios sobre Momias. Durante este tiempo se han celebrado nueve encuentros, con este congreso extraordinario en el camino para 2018. Nadie podía imaginar tal éxito para un congreso científico que, en principio, parecía tan especializado, pero los avances técnicos han probado que los estudios sobre momias son siempre un campo fértil para aplicar nuevos métodos y técnicas para la investigación del pasado, haciendo de ellos un campo de investigación altamente interdisciplinar.

Los congresos han sido “regidos” por el Comité Mundial de Estudios sobre Momias, creado en 1992 como un grupo informal, para ayudar en la organización de futuros congresos y ha estado formado por los presidentes de los eventos previos y otros especialistas seleccionados por alguna razón específica.

En efecto y por ello, la organización de los Congresos Mundiales de Estudios sobre Momias ha sido bastante sencilla, en el sentido de que no ha tenido un formato institucional, líneas maestras o reglas que establezcan como, donde y cuando tendrán lugar los congresos. De alguna manera esto es positivo porque somos un grupo relativamente pequeño y cierto grado de informalidad es saludable. Quizás esta es una de las razones por las que los congresos han tenido ese ambiente amistoso y aunque el Comité sea reorganizado en el futuro es necesario conservar esa atmosfera de amistad que ha estado siempre presente en cada una de las ediciones.